Cómo protegerse del Sol

Una de las mejores opciones en verano es tumbarse al sol, ya sea junto a la piscina o en la playa y relajarse. Sin embargo, ésta es una práctica que puede ser peligrosa, por lo que hay que tener ojo y protegernos adecuadamente para evitar quemarnos.

A continuación te traemos unos consejos básicos para que disfrutes del sol de La Marina sin preocupaciones:

 

                     

 

 1. Evitar las horas de mayor intensidad:

La mayor intensidad de luz solar se produce durante las horas centrales del día (12:00 – 15:00), por lo que es recomendable evitar tomar el sol a estas horas y en su lugar hacerlo por la mañana o entrada la tarde.

 

2. Elige un factor de protección adecuado:

 Los beneficios protectores de la crema solar se verán reducidos si no elegimos un factor adecuado. Utiliza un factor alto (25-50). Ten en cuenta que las cremas solares protegen durante un tiempo limitado, por lo que es importante ponerse crema  regularmente, sobre todo en zonas sensibles como el cuello, la cara, la espalda o el pecho.

 

 3. Aplica el protector de 20 a 30 minutos antes de la exposición:

 No todas las cremas solares actúan de inmediato, por lo que después de echarte debes esperar entre 20 y 30 minutos antes de exponerte al sol.

 

4. ¡Ojo con los protectores poco fiables!

Desconfía de las cremas que anuncian una protección 100%, ya que siempre existe un porcentaje de luz solar que llega a la piel incluso usando un protector solar

 

5. Usa ropa adecuada.

Pantalones, camisetas, sombreros… son prendas que ofrecen una protección eficaz. Pero ten en cuenta que ésta protección varía dependiendo del color y el material. Utiliza colores claros, ya que los colores oscuros absorben la luz solar en mayor medida.

 

6. Gafas solares homologadas:

Los ojos también necesitan una protección adecuada contra la luz del sol, por lo que es muy importante usar gafas de sol homologadas.No tiene nada que ver la calidad de la protección con el precio: simplemente fíjate que sean homologadas y lleven el sello CE.

 

7. Una vez el daño está hecho, cuida las quemaduras.

Si has estado expuesto al sol y te has quemado, en primer lugar evita el contacto con la luz solar. Aplica geles calmantes regularmente y bebe mucha agua.

 

Ahora ya sabes cómo tomar el sol de manera sana. Y súper importante: ante cualquier duda sobre una mancha, ¡acude al dermatólogo! No lo dudes y disfruta del verano.

¡Le esperamos!